El Black Friday es mucho más que un día de ofertas, es un termómetro del mercado y, a menudo, un reflejo de cómo los consumidores compran y qué valoran. En 2024, se ha vivido otro año récord. Las ventas globales han crecido más de un 10% respecto al año anterior, rondando los 1.980 millones de euros, y más del 70% de las transacciones se realizaron a través de canales digitales, destacando la preferencia por la comodidad y la tecnología. Este comportamiento no es casualidad; refleja cómo los hábitos post-pandemia han moldeado un escenario donde el e-commerce es el rey indiscutible.
En paralelo, observamos un crecimiento del ticket medio, que alcanzó los 145 euros, impulsado por categorías como tecnología, moda y electrodomésticos pequeños. Los compradores valoran cada vez más la conveniencia, las entregas rápidas y las recomendaciones personalizadas, creando una mayor presión sobre los retailers para cumplir con estas expectativas.
Sin embargo, detrás de estos números récord, muchos retailers enfrentaron desafíos significativos: productos agotados en horas, retrasos en entregas y dificultades para ajustar campañas sobre la marcha. Estos problemas ponen de manifiesto una cuestión crucial: ¿qué tan preparados estamos para las olas de consumo que vienen?
El paso previo a la IA
Hablar de inteligencia artificial en este contexto puede parecer tentador, pero hay un paso previo que no se puede omitir: la creación de una base sólida de gestión de datos. Sin una base robusta, ninguna herramienta de IA puede generar valor real.
La estructura base de datos implica recopilar, estructurar y analizar información clave sobre los clientes, las ventas y los inventarios. Muchos retailers aún dependen de sistemas fragmentados que no se comunican entre sí, lo que dificulta tener una visión integral del negocio. Antes de pensar en algoritmos avanzados, es necesario invertir en consolidar una infraestructura de datos que permita tomar decisiones informadas en tiempo real.
Un ejemplo claro de esta estrategia es Zara, que ha desarrollado una plataforma centralizada de datos para monitorizar inventarios y analizar patrones de compra. Esto les ha permitido no solo reaccionar ante tendencias emergentes, sino también anticiparse a ellas, reduciendo pérdidas por exceso de inventario y optimizando las entregas.
La IA, más allá del hype
A partir de aquí es donde la inteligencia artificial entra en juego. No estamos hablando de un tema futurista o exclusivo de gigantes como Amazon o Walmart. Estas herramientas están transformando el día a día de retailers de todos los tamaños.
Por ejemplo, Decathlon. Antes del Black Friday, implementaron un modelo de IA que les permitió prever cuáles serían los productos más demandados, desde bicicletas hasta ropa deportiva para invierno. Esto no solo les permitió ajustar su inventario, sino también preparar campañas más específicas que llegaron a sus clientes en el momento adecuado. Resultado: un 20% más de ventas en comparación con su previsión inicial y cero rupturas de stock en los productos clave.
Un futuro dominado por la comodidad y el e-commerce
El éxito del Black Friday y de eventos similares refleja un cambio estructural en los hábitos de compra. La comodidad es ahora el principal motor del comportamiento del consumidor. Este hecho, aunque parezca simple a los ojos del consumidor, afecta notablemente a la operatividad de las compañías, que tienen que adaptarse e incluir servicios que posibiliten, por ejemplo, comprar desde el móvil o las entregas rápidas y devoluciones sencillas.
El comercio electrónico está en el centro de esta transformación, moldeado por avances tecnológicos como la inteligencia artificial, el big data y las plataformas digitales. Según datos recientes, más del 85% de los consumidores prefieren realizar sus compras de forma online, y las ventas digitales seguirán creciendo en fechas clave como la Navidad, San Valentín o el Día de la Madre.
Para los retailers, el desafío no está solo en adaptarse a esta nueva realidad, sino en liderarla. Esto implica adoptar herramientas tecnológicas, pero también construir procesos internos que permitan reaccionar rápidamente a las demandas del mercado.
Lo que la IA puede hacer por ti y por tus clientes
Si aún estás dudando sobre invertir en tecnología de predicción, piensa en estas ventajas:
- Anticipación precisa: ¿Sabías que los datos históricos de ventas combinados con análisis en tiempo real pueden prever con hasta un 90% de precisión qué productos serán tendencia?
- Optimización de stock: No tener que elegir entre quedarte corto o acumular inventario innecesario es, en sí mismo, una ganancia.
- Campañas personalizadas: Entender mejor a tus clientes permite ajustar ofertas y mensajes en tiempo real.
- Eficiencia operativa: Desde cadenas de suministro más ágiles hasta procesos de entrega más rápidos, la IA no solo mejora la experiencia del cliente, sino también tus márgenes.
Más allá del Black Friday
Si algo nos enseña esta fecha, es que las olas de consumo no terminan aquí. En menos de un mes, llegará la Navidad, seguida por San Valentín, el Día de la Madre, y un sinfín de momentos promocionales. La gran pregunta es: ¿estás preparado para el futuro?
Un cliente nos confesaba hace poco que, aunque las cosas habían salido bien este Black Friday, estaba preocupado por la Navidad. Sus equipos aún gestionan inventarios y promociones “a mano,” basándose en su experiencia y algo de intuición. Cuando le preguntamos por qué no adoptaba una solución de IA, su respuesta fue honesta: «No sé por dónde empezar, y siento que es muy caro.»
Pero la realidad es otra: las soluciones de predicción basadas en IA ya no requieren grandes inversiones iniciales. Hoy en día, hay herramientas accesibles que puedes empezar a utilizar de forma incremental, aprendiendo a medida que creces.
Si eres un retailer y te has sentido identificado con alguna de estas historias, te invitamos a reflexionar. ¿Qué puedes hacer hoy para evitar los problemas que enfrentaste en el último gran evento?
- Consolidar una práctica de datos: Invertir en sistemas que permitan recopilar y analizar información clave de forma integrada.
- Adoptar soluciones de IA accesibles: Utilizar herramientas que optimicen la predicción de la demanda y la gestión de inventarios.
- Pensar en el cliente como el centro de todo: Ajustar campañas y procesos logísticos para garantizar la máxima satisfacción.
- Prepárate para la Navidad: Este es el momento de implementar pequeños cambios que pueden marcar la diferencia en tu rendimiento.
Al final del día, no se trata solo de vender más, se trata de estar preparado para ofrecer a tus clientes lo que necesitan, en el momento en que lo necesitan. Si no lo hacemos, alguien más lo hará.
¿Estás listo para el reto? Si no, el momento de prepararte es ahora.
Antonio Crespo
CEO Eraneos Iberia
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